Nota del editor: En este número de LALT, nos complace abrir una nueva sección dedicada a textos publicados originalmente por nuestra casa matriz, World Literature Today (WLT). Estos textos están disponibles en LALT en edición bilingüe, en español e inglés. Este texto fue publicado originalmente en World Literature Today Vol. 97, Nro. 3 en mayo de 2023.
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Con su último libro de ensayos, Read Dangerously: The Subversive Power of Literature in Troubled Times [Leer peligrosamente: el poder subversivo de la literatura en tiempos turbulentos] (2022), la escritora iraní-estadounidense Azar Nafisi ofrece una “lista de lecturas de resistencia” que el Washington Post elogia por brindar “un nuevo canon para las tiranías del presente y las posibilidades distópicas del futuro”. Hablamos por Zoom sobre el poder de los relatos personificados por Scheherezade y Alicia en el país de las maravillas; los hilos intergeneracionales que conectan a los lectores; y el rol de los escritores y lectores en la preservación de la memoria y la defensa de la verdad.
Daniel Simon: Estamos conversando hoy sobre tu nuevo libro, Read Dangerously, que realmente me encanta –muchas gracias por escribirlo–. Creo que calza perfectamente con el tema de nuestro número de mayo, llamado “El futuro del libro”. Y es un momento oportuno para hablar contigo sobre tu propia pasión por la lectura, la escritura y los libros, y sobre cómo han jugado un rol importante a lo largo de tu vida. A través del género epistolar, en las cartas a “Baba”, tu padre fallecido, escribes de manera hermosa en Read Dangeroulsy sobre el hilo intergeneracional que conecta a profesores y lectores, como tus padres, Nezhat y Ahmad, con tus propios hijos y ahora con tus nietos; al profesor James Yoch aquí en la Universidad de Oklahoma y tu estudiante Razieh en Tehran; incluso tus propias lecturas desde Platón a James Baldwin, Toni Morrison y Margaret Atwood durante la década de 1970 y luego de nuevo, recientemente mientras escribías estas cartas. Si un estudiante en Norman o en Teherán te preguntara qué significa leer peligrosamente en 2023, ¿qué le dirías?
Azar Nafisi: Bueno, este libro es en parte una respuesta a la tendencia que he notado, especialmente en los Estados Unidos, donde utilizamos los libros como si fueran comida casera. Los leemos no para que nos perturben o para encontrar algo nuevo, sino que los leemos para confirmar lo que ya sabemos, a veces para confirmar nuestros prejuicios: “¿Por qué no dicen lo que quiero que digan?”, así que no hay ningún desafío –nos sentimos incómodos con los desafíos–. Queremos eliminar en vez de crear un intercambio. Y así, para mí, leer peligrosamente significa que nos arriesgamos a leer para ser perturbados. Como dice James Baldwin, los artistas están aquí para perturbar la paz. Los escritores no están aquí para complacerte.
Para mí, el mejor ejemplo de un buen lector o de un lector que se arriesga es Alicia en el País de las Maravillas. De entre un millón de niñas, existe esta pequeña niña que está aburrida con la rutina de su vida y está en busca de algo distinto. Lo que hace a Alicia tan excepcional es el hecho de que tiene lo que Nabokov llama el tercer ojo de la imaginación. Ella ve la realidad no sólo en sus apariencias, sino que también ve más allá de la realidad, la magia de la realidad. Y ve no sólo a un conejo blanco, sino a un conejo blanco que habla y usa un chaleco y un reloj. Corre detrás del conejo blanco, sin decir, como algunos de nuestros lectores, que así no es como actúan los conejos. Ella se arriesga internándose en el mundo del conejo blanco. Y cuando salta dentro de ese agujero, no se pregunta: “¿Voy a sobrevivir a esto? ¿Qué me va a pasar luego?”, y su recompensa, por supuesto, es el mundo –todo, cada criatura en ese mundo tiene rasgos de los seres en su vida real, pero ella ahora los mira bajo una luz nueva–. Su visión de la realidad cambia a medida que va de una persona a otra.
Lo último que quiero decir sobre Alicia, que creo es muy importante, es que, como todas las buenas historias, desafía y cuestiona, no solo el mundo exterior sino también al lector. Alicia tiene un montón de preguntas sobre estas criaturas, pero cada vez que les pregunta sobre quiénes son o por qué son así, ellos le preguntan a ella: “¿Quién eres tú? ¿Por qué luces así? Te ves extraña”. Ella le dice a la oruga: “¿Quién eres?”, y la oruga le devuelve la pregunta “¿Quién eres tú?”. Por lo tanto, ese es mi concepto de arriesgarse al leer. Los escritores se arriesgan cuando escriben; los lectores también deberían arriesgarse cuando leen.
“Lo que hace a Alicia tan excepcional es el hecho de que tiene lo que Nabokov llama el tercer ojo de la imaginación.”
D.S.: Escribes de forma hermosa sobre tu padre, sobre su ejemplo de cómo leer y escribir peligrosamente, incluso cuando estuvo en prisión. Como un ejemplo para ti, parece que fuera una gran inspiración para crear tus propias fantasías de realidades alternativas, y para motivar a tus estudiantes a hacer lo mismo.
A.N.: Sí, mi padre, cuando estuvo en prisión y estaba en la biblioteca de la cárcel, me dijo que no estaba solo porque estaba rodeado de esos libros. Y cada vez que abría un libro, incluso un libro con el que no estaba de acuerdo, descubría algo nuevo.
D.S.: Eso me hace pensar también en lo que dices sobre David Grossman en el libro: reconocer al enemigo en el espejo. Y en este tiempo de enorme inhumanidad, reconocer la humanidad de alguien que puede estar amenazando tu propia sobrevivencia. Creo que es algo muy valioso de recordar en estos tiempos.
También estaba pensando en la conversación con Moniro Ravanipour que apareció en un número de WLT llamado “Escribir más allá de Irán” en 2015. Ella recalca: “[Los extremistas] no quieren ningún cambio, y el escritor, por virtud de su oficio, intenta cambiar las cosas, cambiar mentes y percepciones”. En la conclusión de Read Dangerously, también escribiste que “donde la mentira se enmascara de verdad, necesitamos limpiar los ojos de la imaginación para ver la realidad detrás y más allá del espectáculo”. ¿Hay algún escritor que hayas leído recientemente que exprese esta imaginación de forma contundente para ti?
A.N.: Bueno, hay tantos escritores, es muy difícil escoger. Siempre digo que, cuando se trata de libros, soy promiscua. Hace poco estuve tratando de organizar y reacomodar mi biblioteca porque cada vez que escribo un libro, cada habitación se llena de libros y de notas. Y entonces tengo que ir y encontrarles un lugar.
Mientras estaba haciendo eso, me topé con un libro en persa, pero traducido al inglés: los relatos de Las mil y una noches. Me gusta hablar de esa historia base porque creo que es la madre de todas las historias. Cuando hablamos de la imaginación y del rol sanador que la imaginación juega en nuestras vidas, podemos volver a Scheherezade y Las mil y una noches. Si recuerdas la historia, está este rey que en es, en realidad, un rey justo, pero descubre a su reina haciendo el amor con un esclavo y pierde el juicio. Y sin oír la versión de la historia de la reina y el esclavo, los mata. De ahí en adelante, decide que, como ella fue infiel, todas las mujeres son infieles. Entonces todas las noches se casa con una virgen y al amanecer la mata, antes de que pueda traicionarlo.
Luego llega Scheherezade. Por supuesto, todas estas heroínas son hermosas, pero Scheherezade es conocida no por su belleza sino por su sabiduría. Y eso hace una diferencia –la sabiduría como atracción–. Ella decide que va a salvar a las vírgenes y a sí misma. Ahora, lo primero que viene a nuestra mente es llevar un arma a la cama y matarlo. ¿Qué tienes que perder si él va a matarte? Lo matas. Pero ese es todo el asunto detrás de la imaginación: no haces lo que hacen tus enemigos, no entras en sus dominios. Probablemente no eres buena en el dominio de ellos de todas formas. Entonces todas las noches ella le cuenta una historia a su hermana mientras el rey escucha, y la deja sin terminar para que a la mañana siguiente el rey quiera saber más. Y esa es otra cosa sobre la imaginación: despierta nuestra curiosidad. Queremos saber, queremos ir a lugares en los que no hemos estado, conocer gente que no hemos visto.
En fin, para hacer el cuento corto, ella le cuenta historias por mil y una noches. Durante este tiempo, él cambia, porque dos cosas le suceden. Una es la curiosidad; querer saber sobre otros y descubrir que no todas las reinas son traidoras y no todos los reyes son justos. Lo segundo que le sucede es que encuentra empatía. Y la ficción, contar historias, es el soporte, el vehículo de la empatía. Todos hablamos sobre la diferencia, pero el shock de reconocer que todos compartimos una humanidad común es muy importante. Scheherezade cura al rey en vez de matarlo. Creo que esa es una gran descripción de lo que la imaginación nos hace o debería hacernos.
D.S.: Muchas gracias por esa bella respuesta que me hace pensar en la tradición oral de los relatos –escribes que donde hay historias, hay esperanza y, a fin de cuentas, amor–. En un mundo en que Rumi y Shakespeare existen, debe haber esperanza, ¿no?
A.N.: Sí.
D.S.: Mi próxima pregunta tiene que ver con eventos contemporáneos en Irán relacionados con las protestas recientes. Como sabes, por supuesto, las fuerzas de seguridad iraní irrumpieron en las protestas que surgieron después de la muerte de Mahsa Amini en septiembre de 2022. ¿Qué noticias has tenido de tu amiga a la que llamas Shirin en el libro? ¿Cómo está?
A.N.: Ya sabes, las primeras semanas de insurrección estuve intentando desesperadamente contactarme con ella, y no podía –el gobierno había bloqueado toda la comunicación, y yo estaba volviéndome loca porque no podía contactarme con nadie–. Finalmente, nos conectamos por Whatsapp. Y ahora nos conectamos principalmente por Whatsapp; ella me envía videos y documentos y me cuenta qué está pasando. Pero la primera vez que hablé con ella, me di cuenta de que ambas –yo viviendo en Washington D.C. y ella en Teherán– teníamos la misma reacción hacia la insurrección. Por un lado, había una sensación de rabia e indignación y, ella me lo decía, frustración por no poder prevenir esta violencia: tiroteos durante las manifestaciones pacíficas, en que se apuntaba a los ojos de las personas, dejándolas ciegas. Pero la diferencia entre esto, decía Shirin, y lo que sintió durante las protestas en años anteriores a esta, era que en esas otras protestas todo terminaba con la gente yéndose finalmente a sus casas. Pero, ahora, ella decía, el pueblo iraní está harto de la reforma. No creen que este régimen sea capaz de cambiar, y no ven un futuro posible. Por lo que están luchando por sus vidas. No hay otro lugar a donde ir, sino ir a luchar, desafiar.
Ella decía algo, que de hecho menciono en Read Dangerously, donde cada vez que hablábamos, ella se quejaba de los medios occidentales y de cómo le dan tanto espacio al régimen y sus apologistas, y no muestran al pueblo de Irán. Ella decía, con algo de alegría en su voz: “¡Lo logramos! Ahora están escuchando nuestras canciones, dándoles premios a nuestras canciones”. Esta insurrección, me decía, produjo algo que se sintió parecido a un milagro: conectarnos con el mundo, permitir que el mundo tenga acceso a esa parte de Irán que fue olvidada tiempo atrás. Por eso tengo mucho temor por ella y por aquellos que están en Irán –casi siento que el miedo corre por mis venas como sangre–. Pero cada vez que hablo con ella, también tengo mucha esperanza. Estoy de acuerdo con ella en que no vamos a volver atrás.
D.S.: De verdad parece como si se hubiera producido un cambio radical en las aspiraciones del día a día del pueblo iraní en cuanto a que esto puede terminar, a que debe terminar. Y eso es esperanzador.
“Las mujeres iraníes han descubierto su poder: ya no tienen miedo.”
A.N.: El pueblo iraní, especialmente las mujeres, han descubierto su poder. Ya no tienen miedo. Puedes ver que los roles han cambiado, es el régimen el que tiene miedo. Y esta violencia no nace de la fortaleza; nace de la debilidad, porque no tienen nada más que violencia en su arsenal, lo que no funciona, lo que vuelve a la gente más decidida.
D.S.: En una entrevista reciente con Mary Louise Kelley emitida en NPR, el Ministerio del Exterior iraní, Hossein Amir-Abdollahian, culpó a los protestantes recientes de ejercer violencia, apoyados por fuerzas de Estados Unidos e Israel (9 de febrero, 2023). Tal hipocresía parece ser una de las tácticas más antiguas en el manual del régimen. A pesar de esto, cuando piensas en el futuro de Irán, ¿qué te da esperanzas? ¿Hay otras cosas que encuentres esperanzadoras, pese a esta mentalidad atrincherada?
A.N.: Me alegra que menciones la entrevista con esta persona en NPR porque el totalitarismo se alimenta de mentiras. Me refiero a que no sólo se alimenta de mentiras, vive de mentiras, no puede sobrevivir sin mentiras. Y por esto mismo es que necesitamos aún más de la imaginación, porque la imaginación está en busca de la verdad. Y la verdad, una vez que la conoces, no puede permanecer en silencio. Si te callas, te volverías cómplice de los crímenes que se han cometido, incluso en tu contra.
Primero déjame clarificar la manera en la que entiendo la esperanza. Václav Havel dice que la esperanza definitivamente no es optimista, no es la convicción de que algo bueno va a pasar, de que vamos a recibir una recompensa por lo que hacemos. Es la certeza de que lo que hacemos tiene sentido, es significativo, sin importar la recompensa. Creo que esa es la forma de esperanza que el pueblo iraní ha conquistado. Están luchando por su existencia. Y es por eso que la consigna “Mujer, Vida, Libertad” es tan diferente a cualquier consigna política. La razón es que para la mujer iraní y para el pueblo iraní en su totalidad, esta lucha no es política, o no es solamente política, sino existencial. Recuerdo cómo me sentí la primera vez que fui expulsada de la Universidad de Teherán por negarme a usar el velo. No usaba mi velo apropiadamente, no porque quisiera hacer frente políticamente, sino porque mi existencia estaba en peligro. Si haces lo que te dicen, te modifican. En términos prácticos, es algo así como una muerte.
Entonces estás luchando por tu vida. Vida se convierte en sinónimo de libertad, y por esto es que luchamos. Para las mujeres se vuelve un asunto de orgullo, un asunto de dignidad. Si yo, como mujer, como escritora, como lectora, como profesora, como simplemente una persona, no puedo ser o sentir o expresar quién soy y cómo soy, entonces algo está mal. Entonces hay un asalto a mi integridad como ser humano. Estamos luchando por nuestra humanidad. Y por eso tengo esperanza, porque estamos luchando por la vida. Y hay una gran cantidad de esperanza, no solo para nosotros, sino para el mundo.
“Para el pueblo iraní en su totalidad, esta lucha no es política, o no es solamente política, sino existencial.”
D.S.: Lo has dicho de una forma bellísima. Como dices en el libro, la libertad no es sólo una construcción occidental. Escribes que es un derecho humano universal como también una aspiración, no algo sobre lo que Occidente tenga un privilegio especial para poder expresar. El ejemplo de las mujeres iraníes y de las jóvenes protestando por el hiyab tiene tantas implicancias, como dices, en términos de dignidad y sobrevivencia.
A.N.: ¿Puedo decir algo? Lo que estás diciendo me recuerda a mí misma cuando en el inicio de la revolución de 1979, Khomeini promulgó una fetua para que el uso del hiyab para las mujeres fuera obligatorio, y decenas de miles de mujeres iraníes salieron a las calles, desafiándolo, y tuvo que retirarla. En ese tiempo, eran atacadas con tijeras, y se les tiraba ácido en la cara, pero su principal consigna hablaba de lo que estabas diciendo y era que la libertad no es occidental ni oriental, la libertad es global. Mientras hablabas de esto, me quedé pensando en la consigna y en lo verdadera que es.
D.S.: Esa es una perspectiva maravillosa, históricamente, como también en las protestas más recientes. Tengo una última pregunta sobre los futuros lectores de los que hablas en tu libro. Citas a Margaret Atwood, quien escribió que “cada historia registrada supone un futuro lector”, y “los lectores se transforman en guardianes de la memoria, en guardianes de la verdad”. En el contexto de este número enfocado en “El futuro de los libros”, ¿qué memorias y qué verdades esperas que los futuros lectores conserven de tu obra?
“La imaginación va más allá del totalitarismo y la democracia. Interpela a nuestra humanidad, en contra de cualquier forma de absolutismo, incluido el absolutismo de la muerte.”
A.N.: Creo que hay tres puntos que me gustaría tocar. Uno es el hecho de que la imaginación trasciende todas las limitaciones que la realidad nos pone en frente o que nos impone. La imaginación trasciende las limitaciones de nacionalidad, lenguaje, raza, género, etnia, religión. Y crea lo que llamo una república de la imaginación en la que todos vivimos. Porque nos apasionamos con la vida y nos apasionamos con la imaginación. Lo segundo se relaciona con Atwood y los lectores como guardianes de la memoria. Esto me recuerda a Tzvetan Todorov, el pensador de Europa del Este. Todorov dijo: “Sólo el olvido total lleva a la total desesperación”. La imaginación va más allá del totalitarismo y la democracia. Interpela a nuestra humanidad, en contra de cualquier forma de absolutismo, incluido el absolutismo de la muerte. Es por eso por lo que la memoria es tan importante, porque interpela a nuestra humanidad.
Lo último que quiero decir es que Saul Bellow, hablando sobre regímenes totalitarios y democráticos, escribe que los regímenes totalitarios como la Unión Soviética son bastante obvios. Quiero decir que Stalin se sirve de la muerte y sabemos de esta violencia desnuda. Pero en las democracias no matamos a nuestro oponente o lo metemos en la cárcel –ni simplemente prohibimos sus libros, como se hace hoy en día–; lo que nos amenaza es la consciencia dormida y el sentir atrofiado. Eso es lo que me preocupa actualmente. Lo que la imaginación hace, despierta nuestros sentidos, despierta nuestra consciencia. Lo que hace la ficción, celebra la vida, con todo su dolor y su alegría, y nos hace estar vivos, vivos simplemente.
Por eso quiero involucrar al lector. Quiero decirle al lector que no es simplemente un observador pasivo. Una vez que lees el libro, eres responsable. Quiero terminar con una cita de Nabokov, que utilizo en Read Dangerously. Él dice: “Los lectores nacen libres, y deben permanecer libres”. Lo que debemos recordar es que hay que luchar por esa libertad. Si no, vienen y queman tus libros o prohiben tus libros. Incluso en democracia.
D.S.: Lo que nos hace volver a Platón y la vida noble en contraposición a la verdad subversiva del poeta, que ve más allá de las sombras en la pared de la caverna y reclama esa libertad y esa vida.
A.N.: Eso es muy cierto, muy cierto.
D.S.: Muchas gracias, Azar, ha sido un verdadero placer. Ha sido maravilloso compartir este momento.
A.N.: Gracias.
17 de marzo de 2023
Traducción de Micaela Paredes Barraza