Conocí a Eduardo Chirinos hace unos veinticinco años, cuando yo enseñaba traducción como profesor de medio tiempo en el Departamento de Español y Portugués de Rutgers University y él estaba completando su tesis doctoral sobre poesía latinoamericana allí. Cuesta creer que Chirinos todavía fuera un estudiante de posgrado mientras escribía los poemas de El equilibrista de Bayard Street, el libro que, según José Miguel Oviedo, marca el inicio de su etapa “madura”, dado que, a esa altura, Chirinos ya podía presumir de unas siete colecciones de poesía completas. (Llegaría a publicar unas veinte colecciones, incluidas antologías, además de ensayos críticos, artículos ocasionales, traducciones, libros infantiles y otros trabajos antes de su muerte en 2016). El equilibrista de Bayard Street no tuvo una versión bilingüe completa hasta 2017, año en el que University of Montana Press lanzó una edición conmemorativa para el vigésimo aniversario del texto tras publicar Written in Missoula en 2011. Entretanto, Chirinos y yo habíamos tomado caminos diferentes, en busca de trabajos académicos en los confines más remotos del imperio, y nos dedicamos a este oficio de la traducción colaborativa por más de una década, casi exclusivamente a través de correspondencia electrónica. En las pocas ocasiones en las que luego leíamos o presentábamos nuestro trabajo juntos, aprovechábamos esa cercanía fugaz para hacer correcciones de último momento a mis versiones en inglés y para atar cabos sueltos en general.
Los poemas y traducciones de estas páginas pertenecen al manuscrito bilingüe sin publicar de Tetramorph, la primera colección de Chirinos en la que trabajé, desgraciadamente, sin contar con sus aportes siempre amistosos, aunque sí conté con la colaboración indispensable y esclarecedora de Jannine Montauban, testamentaria de la herencia de Chirinos. Cuando se edite, este será el décimo volumen publicado de poemas de Chirinos traducidos por mí. Además de los dos títulos mencionados más arriba, los otros siete son: Reasons for Writing Poetry (Salt Publishing, 2011), una suerte de antología personal y nuestra única colección monolingüe; The Smoke of Distant Fires (Open Letter Books, 2012), finalista del PEN Award for Poetry in Translation en 2013; While the Wolf Is Around (Diálogos Books, 2014); Thirty-Five Zoology Lessons (and Other Didactic Poems) (DíazGrey Editores, 2015); Medicine for the Ailments of Falcons (Literal Publishing, 2015); Still Life with Flies (Dos Madres Press, 2016) y, más recientemente, A Brief History of Music & Fourteen Forms of Melancholy (Diálogos Books, 2020). Mi primer impulso al intentar enmarcar las obras que leerán aquí es afirmar que provienen de un volumen “único”, pero ¿cuántas veces describí colecciones anteriores de Chirinos con el mismo adjetivo?
Un párrafo, con solo unas pocas modificaciones, de una carta de presentación típica que uso al enviar a revistas traducciones de poemas sueltos que forman parte de los libros completos más convencionales de Chirinos dice lo siguiente: “[Los poemas del manuscrito del cual se tomaron estas traducciones] tratan muchos de los temas y cuestiones que aparecen en la obra completa de Chirinos: el retorno a la niñez, una fascinación con los animales, los caprichos de la memoria, la realidad alternativa de los sueños, la utilidad de la vista y el oído, el lugar del escritor en la tradición poética, el comentario permanente sobre el arte y el cine y la inagotable búsqueda de originalidad a través de la expresión innovadora, sumados a reflexiones literarias sobre la enfermedad. La poesía de Chirinos libra una batalla constante contra el agotamiento lingüístico, evitando con frecuencia los clichés por medio de un tono irónico y una elocuencia simple”.
Humo de incendios lejanos, por ejemplo, también es un libro único. Está compuesto en su totalidad por trece poemas de diez estrofas, cada uno de los cuales prácticamente carece de puntuación, y la fluidez de su lenguaje motivó a Daniel Shapiro en su “Introducción” a ver el volumen como el punto más elevado del trabajo de Chirinos hasta la fecha, “que demuestra… un paso de la imagen a la voz, de colecciones de poemas individuales a un poema largo y sostenido”. Si hablamos de libros únicos, 35 lecciones de biología es, análogamente, el tipo de “catálogo” que le gustaba a Chirinos, con descripciones que se extienden durante treinta y cinco párrafos sobre algunas de las criaturas más extrañas de la naturaleza. (Chirinos tituló una antología personal anterior de sus obras, del año 2012, Catálogo de las naves, pero hay suficientes textos sobre poetas, pinturas y películas en su muy diversa obra completa como para llenar otras antologías sobre esos temas). De hecho, dada su afición por la noción de catálogo, el poeta se tomó el trabajo de señalar en su “Preludio” de Breve historia de la música que “el libro, en términos estrictos, no relata una historia de la música ni mucho menos intenta presentar una por medio de palabras”. Los lectores de Medicinas para quebrantamientos del halcón podrían sospechar a partir de su título intrigante que se trata de otro de esos textos singulares, una suerte de colección de álbumes de poemas interrelacionados, muy parecidos a los de Tetramorfos, donde, metafóricamente, se combinan el temido “huésped” del cáncer que habita en el alter ego del autor con el canciller Pedro López de Ayala, que escribió el Libro de la caza de las aves mientras esperaba que pagaran un rescate que lo liberaría de una prisión portuguesa a fines del siglo XIV: ¡un motivo ciertamente complejo!
Siguiendo con esta tradición, Tetramorfos es, en esencia, una meditación poética sobre el ícono del título, una cruz adornada con los evangelistas Mateo, Marcos, Lucas y Juan junto a sus símbolos correspondientes de hombre, león, ternero y águila, respectivamente. El volumen busca explorar las identidades de estos supuestos autores del Evangelio, tanto de su vida como de su leyenda, mostrando la infinidad de incertidumbres que hasta el día de hoy rodean su verdadero ser. Formado en su mayoría por poemas en prosa, Tetramorfos contiene muchos textos ecfrásticos sobre pinturas religiosas y una que otra obra corta, todos los cuales exhiben la ironía y el tono jocoso característicos de Chirinos. Se trata de la última colección bilingüe de Chirinos disponible (en manuscrito) por ahora, y su escritura, aunque no su publicación en español (Peisa, 2018), precede en algunos años la de Naturaleza muerta con moscas, la única colección del autor publicada primero en formato de páginas enfrentadas.
Traducción de Gabriela Rabotnikof