Sóplame
un canto sencillo y duradero
un canto que no se corrompa
un canto que no sea tocado
un canto
que no sucumba ante el pasar imperturbable de todas las cosas
–famo ñi lawen mo–
Un canto brotado en la leche del mapunzugun
eso quisiera
si volviera a nacer
la leche Küpalme
la leche llanka lawen
la leche feñfeñko
la leche contra lawen
la leche cuchillo
la leche winkül
la leche de todas las cosas
esta ansia del aliento por nombrarse
voracidad soñada
arrancada
desde la garganta con chicote y alfitxa
sólo la leche que endulza el veneno
de todos los lamentos
de todas las vergüenzas de todos los desprecios
esta leche chesungun
chacay latue chaura leche
kuñifal leche
mapunzugun
comadrona
de mil nudos de batallas nunca perdidas
si esta leche tibia
hebra a hebra
me poseyera
me amamantara un día
si usted volviera a preguntarme si nacería de nuevo en mapunzugun
si usted volviera
¡¿hilaría acaso el nido donde los pájaros van a encender el fuego?!
¿sería capaz de amasar el barro donde la menta negra huele a los primeros nacidos?
¿sería saciada ñi Wünelfe?
Dímelo tú
Que no sólo la lengua hable mapunzugun
que el cuerpo sea mapunzugun
que los pies sean mapunzugun
que el sudor sea mapunzugun
que tus huesos sean mapunzugun
que tu pewma sueñe mapunzugun
Que la danza desbocada de los días
sea mapunzugun
la materia agridulce que en todos los seres baila
sea mapunzugun
el resuello
el vómito
el sarcasmo inútil y vanidoso de los siglos
se vuelva mapunzugun
esas oscuras y frías vertientes que resuellan como culebrones heridos
cuando cae la noche
memoria de secretas trasgresiones y olorosos desvaríos
mapunzugun palpitante
crudo
como
el ardiente
corazón de un carnero
aleteando en la tierna desesperación de la entrega
Del libro inédito Cantos de amor al lucero de la mañana
Curatoría y selección de Paula Miranda y Andrea Vargas